Fomentar el capitalismo popular mediante el establecimiento de incentivos tributarios para el cambio de la estructura societaria de las empresas privadas ecuatorianas. La actual estructura societaria de nuestro país, donde priman las empresas familiares, con alta concentración de capital y con una administración que recae en los familiares de los dueños y no en administradores profesionales, constituye un anacronismo que pone en una situación de desventaja competitiva a las empresas ecuatorianas. Es por ello que resulta necesario establecer un esquema tributario distinto para aquellas empresas que abran su capital al público, que se sometan a principios de buen gobierno corporativo y que adopten prácticas responsables de cuidado al medio ambiente, de respeto a los derechos laborales, el trato justo a proveedores y que promuevan el desarrollo de las comunidades en las que operan.